Espiritus del mundo invisible,
espiritus de cuantos habeís sufrido
tribulaciones y pesares
en vuestro paso por la tierra,
os ruego que escuchéis mis palabras
e intercedáis por mis deseos.
Espíritus bienaventurados y misericordiosos
de cuantos sufristeis martirio y dolores en
vuestra existencia
terrena os suplico que acojáis mis súplicas
y tengáis en cuenta mi petición
y me ayudeís a vencer la mi timidez
que en ocasiones me causa problemas
y no me permite aprovechar
algunas oportunidades que se me presentan.
También os pido ayuda en el desarrollo de mi
personalidad,
que me déis fortaleza y perseverancia,
que hagáis de mí una persona fuerte, digna y
justa.
Os frezco esta oración diaría
para la culminación de mi éxito.
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