Los anillos de plata son poderosos talismanes, portadores siempre de buenaventura y muy beneficiosos. Los mayores efectos se consiguen si se utilizan dos anillos, que pueden llevarse bien como pendientes, o bien ensartados en un cordón para colgarlos al cuello, o bien propiamente como dos anillos colocados en uno o dos dedos. Solo hay que utilizar un par de anillos, pues de lo contrario el talismán no funcionará en absoluto.
Estamos pues ante un talismán que limpia los deseos malsanos de la mente, evitando así el desgaste de energía, por lo demás inútil, que se produce cuando generamos pensamientos negativos y nuestro mundo interior está lleno de misterios y ruindades, envidia, celos, mentiras, afán de venganza...
Los anillos de plata también se llaman Aretes de la Luna, y fueron introducidos y utilizados por las antiguas tribus nómadas de cíngaros y romaníes que, durante el medievo, transitaron y trazaron los caminos de la vieja Europa, dejando la huella de sus costumbres y creencias por ciudades y pueblos, aldeas y villas, fortalezas y castillos, abadías y conventos.
Cada anillo representaba una luna robada por la noche cuando se reflejaba en las aguas tranquilas y transparentes de pozos artesanos, fuentes, ríos y lagos.
Los anillos de plata funcionan también como amuletos, en cuyo caso se personaliza con el uso, aunque hay dos requisitos por así decirlo que deben cumplirse antes de utilizarlos. El primero se refiere a la salud, ya que el talismán no surte efecto cuando la persona que lo utiliza está enferma, y el segundo tiene que ver con la predisposición y la actitud, pues solo quienes creen en las virtudes de este amuleto se verán beneficiados por sus efectos.
En las noches de plenilunio debes depositar tu talismán dentro de un objeto que sea de plata y exponerlo a la luz de la luna llena hasta que llegue el día.
Cuando tengas un problema de convivencia con tu esposo o esposa a causa de los celos, llevarás los anillos de plata como amuleto durante dos semanas, al cabo de las cuales tendrá que resolverse el problema.
El brillo que irradian los anillos de plata, reflejo de la luminaria luna que ilumina la noche y aleja las sombras, penetra en los corazones de los hombres y mujeres del mundo para ayudarlos a superar la desventura y hacer frente a la adversidad, alcanzando su máxima energía en dirección oeste.
Regala un anillo de plata (recuerda que tu llevar dos anillos) a tu pareja y pide un deseo relacionado con la fidelidad, la pasión amorosa, la compañía y la felicidad. De inmediato obtendrás buenos resultados.
Los anillos de plata, al provocar la atracción beneficiosa de la luna, incrementan la buena suerte y provocan la atracción de bienes económicos y suerte en juegos de azar.
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